lunes, 1 de noviembre de 2010

Todavía me emocionan ciertas cosas...

Hoy ella soy yo, porque hay cosas de las que me gusta hablar sin desdoblarme en este juego que inventé para que me fuera más fácil expresarme.
Hoy soy yo quien se refiere a la muerte del ex presidente Néstor Kirchner de un modo personal, por todo lo que este acontecimiento me llevó a reflexionar.
Hay muchas cosas de las que se dicen, tanto a favor como en contra, con las que no coincido. Tenía y tengo, frente a su gestión y a su persona, una posición bastante neutral.  Pero lo que pasó en estos últimos días fue algo que me sorprendió mucho y al mismo tiempo me llenó de esperanzas. Porque, si bien es cierto que no estoy de acuerdo con varios de los motivos por los cuáles muchos lo admiran, lo seguían y lo lloran, me provoca cierta, por llamarlo de algún modo, alegría, ver que todavía hay tanta gente que elige creer. Tanta gente que se involucra, que se ve afectada por asuntos de militancia, de ideologías, de proyectos. Tantos que dijeron y dicen ¡Fuerza Cristina! pensando en la persona, en la mujer que perdió a su compañero de vida y de lucha de tantos años, pero también en la Presidente que hoy debe seguir adelante con sus deberes, acechada por tantos buitres, por tantos contras y tantos problemas. Me asombré al darme cuenta de cuántos conocidos se sumaron al dolor general, algunos de las cuáles nunca hubiera sospechado tales sentimientos.
Me emocionan las personas, las ganas de formar parte, las palabras de apoyo y la congoja. Me emocionan porque significa que todavía podemos ser muchos para algo bueno, todavía podemos unirnos en lugar de seguir por la vida con anteojeras dejando que el techo se derrumbe sobre nosotros y haciendo de cuenta que no pasa nada. Entre todos podemos, esa es hoy la mayor certeza entre tanta incertidumbre.

3 comentarios:

Luchin dijo...

El pueblo unido jamás será vencido!
Un beso!!

Ella dijo...

¡Así será! Besos Luchin, gracias por pasar!

Unknown dijo...

La esperanza mueve a los pueblos, la esperanza es el arma natural con la cual los hombres buscan su destino.
La esperanza es sinonimo de lucha y de compromiso.