Le di un tiempo determinado. Lo intenté pero, inconcientemente, le puse un plazo. A los 28 años, después de 8 años de facultad, no me recibí y decidí abandonar. Bueno, en realidad hace como 3 años que vengo abandonando de a poco. Sólo desde el año pasado la decisión fue conciente y adrede. Sólo desde hace unos pocos meses puedo expresarlo en palabras.
Le di su tiempo, a veces pienso que demasiado sabiendo que desde el principio mi corazón miraba hacia otro lado. Pero no, está bien, tuvo el tiempo que tenía que tener. Hoy, aunque cada tanto me lo reprocho, no me arrepiento. Sé mucho más de lo que sabía. Pero no sólo en términos académicos (quizás sea de lo que menos aprendí). Sé de la experiencia de la facultad, de cursadas, trámites, parciales y trabajos prácticos. Sé de las cosas que se aprenden más allá de los libros y de la gente que puede marcarte. Pero... no tengo título. ¿Acaso importa?
Desde que decidí dejar la facultad encontré lo que, hoy creo, es mi lugar en el mundo.
No quedan dudas de que, para que lo bueno llegue, hay que dejarle el lugar.
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6 comentarios:
Está bueno decidir. Eso es lo que importa. Felicitaciones!
Saluditos.
Otra vez con esas reflexiones profundas, otra vez dejandome lugar para pensar.
Solos y en libertad vamos aprendiendo a ser nosotros mismos, ocupamos el lugar que deseamos, y hasta nos damos el lujo de poder cambiar.
Pero si aparendemos a decidir junto a otro u otros por fin llegamos a encontrar el camino.
Brillante como siempre amiga
¡felicitaciones!
http://www.inhumorinhumano.blogspot.com/
quinto año.
95 años para el centenario.
195 para el bicentenario.
Xaj: Y si, en algún momento la decisión hay que tomarla para no dejar que el tiempo decida por nosotros. ¡Gracias, saludos!
Walter: Gracias amigo, briilante tú!
el ex-céntrico etc.: ¡Bienvenido! Permitame abreviarle el nombre ¡se me complica con tanta cosa!
Es un buen razonamiento.El dejar un espacio para que otro/a lo ocupe,es una excelente postura. En mi caso ,siempre asegurè que ella me habìa abandonado...Tal vez una manera de no reconocer mi responsabilidad en el tema.
Beso
¡Gracias por pasar Juanca! Suele pasar que uno responsabiliza de muchas cosas de nuestra vida al tiempo, a las circunstancias, a factores ajenos a uno. El punto es que, en última instancia, siempre termina siendo uno el que permitió que esos factores influyeran en nuestras vidas. Lo importante es al menos saber reconocerlo.
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